Para las madres de todas las culturas perder una hija es tal vez la más injusta de todas las tragédias.

Dicen mis amigas antropólogas que vivieron un tiempo con las tribus africanas que allí cuando una hija muere los dioses la convierten en una estrella del cielo para que se madre pueda mirarla y conversar con ella por las noches...

Desde que yo era chica, siempre soñaba con tener una hija cuyo nombre iba a ser Mariana. Con ese nombre ella vino al mundo, vivió 47 anos y se fué suavemente dejándonos una vez más abismados ante el misterio de la vida y de la muerte.

De la mañana a la noche, una recurrencia de cáncer de pulmón operado cuatro años atrás, más una metástesis en los huesos la dejaron sin poder caminar y en la cama para siempre.

Lo más extraordinário fué que durante esos últimos seis meses de vida nuestros diálogos fueron más intensos que nunca.. Pudimos conectarnos como jamás lo habíamos logrado antes. Juntas tocamos el dolor, las broncas,las dudas, las deciciones difíciles, los miedos a lo que vendrá...

Como una montaña rusa con profundas subidas y bajadas, así fué la enfermedad.

Yo era el enlace con los médicos y pude acompañarla paso a paso respondiendo siempre con la VERDAD a terrores y preguntas por dolorosos que fuesen.

Ella me dió entonces toda su confianza.y yo le dí mi compromiso de ESCUCHARLA hasta en los mínimos detalles para ser un instrumento de su voluntad..

Fuí testigo de su inquebrantable fortaleza cuando peleaba por la vida en los tiempos en que todavía tenía esperanzas así como de la inmensa dignidad conque vivió la batalla perdida. Cuando supo que el tratamiento de quimioterapia ya no podía dar resultados para detener el mal, resolvió parar con todo.

Elegió morir em casa. No habría internaciones, tratamientos experimentales, sueros, goteos de morfina,tubos de oxígeno o respiradores.

Para que seguir agrediendo el cuerpo .con pinchazos y tóxicos que dañan el alma? me dijo.

Me sorprendía la misteriosa ecuanimidad y hasta el humor con que iba aceptando la pérdida de todo: su cuerpo. sus sueños, sus pertenencias

Fuí su acompañante de apoyo cuando pidió la extremaución, cuando hizo su testamento,cuando lloró con los que tenía asuntos inconclusos,cerrando viejas historias.

En especial cuando después de unos días de reflexión decidió instrumentar a los más próximos para completar su sueño: Camaronês, junto al mar, su proyecto más querido. Hacer um lugar próprio para reunir a toda la família em su querida Patagônia.

En el proceso de dejarse morir . impresionaba la lucidez con que organizaba la partida. Lo pactado era que no habría dolor físico. Lo evitaríamos contra viento y marea. Para ello tomamos todos los recaudos. Teníamos al Doctor Saurí, oncólogo, especialista en dolor,nuestro guru, nuestro guía eficaz y compasivo. Uma persona incondicional, con la palabra justa cuya presencia constante nos daba seguridad.

Ademas Mariana y yo teníamos nuestras prácticas para aliviar el sufrimiento.TONGLEN, del Budismo,visualizaciones, ejercicios de respiración. Mantras que apaciguan la mente. Nos concentrábamos cayendo más y más hacia.adentro , siempre respirando,para encontrar el lugar donde reside lo que no muere:el Espíritu, o el Si-mismo que como fuente liberadora no es diferente de Dios.

Otras veces imaginábamos el viaje hacia el infinito como un lugar en el más allá donde no hay tiempo. Allí llegaríamos toda la família junta precisamente porque no hay tiempo, entonces nadie tendría que esperar a nadie...

También nos facinábamos leyendo el I Ching, el libro de las mutaciones y el Tão Te King. Mariana se enganchaba con la idea de la corriente del Tão que fluye como el água, con el no-forzar, con el permanecer en el Eterno Ahora.

Una amiga antroposófica ,la doctora Diquio ,me dijo que era bueno para alinear los tres cuerpos, físico,sutil y causal,leerle a Mariana viejas historias que ella habría escuchado de chica. Así empezamos a romper el aburrimiento de estar siempre en la cama entrando en el mundo de las MIL Y UNA NOCHES.

Para entonces ya Mariana dormía mucho, entraba y salía de su ensueño.Yo le preguntaba: - Estás escuchando? Sigo leyendo? Una vez me respondió: Si, seguí y también buscame um rey como el de Sherezade que me deje vivir una noche más...

Poco a poco dejó de atender el teléfono y se cerró a las noticias del afuera.Sólo le interesaba la família, las noticias de los hermanos y los sobrinos y la companía de nosotros três: papá, mamá y Mema,su hermana.melliza.

Su mundo se fué reduciendo a un cuarto donde todo tenía que estar como ella pedía. Su padre siempre presente sentado en el sillón blanco a veces proponiendo hacer las palabras cruzadas del dia. Mema , com sus cuidados extraordinarios y su inmenso amor. A veces Mariana queriendo protegerla la mandaba "a casa para que no se canse tanto".Los dos ángeles de la guardia Myriam y Lourdes que se adelantaban a todos sus deseos. La mesita de los remedios con cada cosa en su lugar y algunas estampas y cartas que le habían mandado personas que la querían mucho.

Cuando los plazos se fueron acortando y pensamos que ya casi no tenía fuerzas, llamamos a sus hermanos Marco y Nicolás para estar con ella todavía lúcida. Fué el último encuentro de padres y hermanos durante 5 días juntos hablando de cualquier cosa menos de la despedida.

Mariana se iba durmiendo cada día por más tiempo.Cuando estaba despierta ya no le interesaba hablar del pasado o del futuro. Solo le interesaban los temas relacionados con la enfermedad. Por ejemplo: lo que pasaba en el grupo de Multifamilias del Hospital Roffo donde estaban internados otros enfermos de cáncer

Yo asistía al grupo de los jueves con otros padres, maridos o hermanos que también tenían alguien grave. Mariana quería saber todas las historias del grupo.

Una vez el Capellán del Roffo cerro el grupo contando esta historia:

" Dos viejitos le pidieron que diera una misa porque sentían que ellos ya estaban cerca de partir a la otra vida. La viejita estaba un poco ida de la cabeza. En médio de la misa se levantó y se puso a bailar alegremente.La gente quería hacerla sentar pero el Capellan les dijo: No, no, déjenla que baile porque al cielo se entra bailando..... solo los que se quedan en la tierra se quedan llorando..".

A Mariana le encantó esa historia y unos días después me dijo: Yo no quiero llegar a Navidad, quiero irme antes. La Navidad con todos alrededor de mi cama va a ser muy triste Quiero irme antes. Con la firmeza que siempre tuvo para hacer lo que quería tomó la determinación. Siempre hizo lo que quizo, también iba a hacerlo ahora.

Lo último que me dijo fué : Yo ya quiero bailar. Donde están los pasajes?

Pongamos música le contesté y esa mañana pusimos el OM MANI PADME HUM alternando con cantos gregorianos grabados en una iglesia rusa.

A la tarde vino el Doctor Saurí confirmando que el fin estaba próximo. Su padre y yo estuvimos los dos juntos todo el tiempo al lado de su cama teniéndole la mano. Entonces mientras ella empezaba a respirar agitada (fué una media hora) yo le dije despacito:

"Aqui estamos tu papá y yo, no tengas miedo, nada malo te puede pasar. Fuistes una muy buena hija.... SOLTATE ahora , dejate ir, no te aferres a nada, está todo bien y nosotros te vamos a ir a encontrar pronto donde quiera que estés."

Ella entró em una respiración más tranquila. Ramón se sentó en el sillón blanco y yo me recosté unos minutos. Cuando volví a su lado suspiró varias veces sin abrir los ojos.Luego hizo três expiraciones más largas y dejó de respirar.

Ramón. vení, Mariana se fué.... Tratamos de hacer la respiración boca a boca pero ya había partido...... Estará entrando al cielo , seguramente bailando –pensé- como dijo el Capellan o tal vez esté entrando em el bardo de la Luz Clara donde tendrá sin distraerse que reconocer la Luminosidad base , como.dice el libro tibetano...

Lo cierto es que un resplandor de paz y serenidad inundó el cuarto.El mantra de la Compasión sonaba en el grabador.

Con Ramón la vestimos con una blusa blanca y una pollera larga blanca improvisada. Estaba lindísima. Sentí la conección con lo sagrado a través de un sentimiento de Unidad con todo. Eran las ocho menos cuarto de la noche del sábado diez de Diciembre. Las amarras acababan de soltarse y nosotros, los padres, habitábamos la estela del barco que se iba...

PARA MARCELA

No HACER

SINO QUE TODO SE HAGA EN UNO.

TENDERSE

COMO UN FRESCOR AL QUE EL DOLOR SE ARRIMA

CANTE UN PAJARO O LLORE UNA MADRE

TODO ES ARMONÏA

SOBRE LA PALMA AMOROSA 

DE DIOS.

DE MARÏA 

SU HIJA DEL CORAZÖN

l